El tratado de los objetos musicales y la enseñanza del análisis conjunto de la imagen y el sonido
El Tratado de los objetos musicales es el informe de una investigación acerca del sonido que Pierre Schaeffer realizó entre las décadas del cincuenta y del sesenta y que dio a conocer en 1966
En la primera parte de la obra, su autor, narra las instancias de descubrimiento. En la segunda parte expone de modo más o menos sistemático el producto de su investigación, es decir, la tipología, la morfología y la caracterología de los objetos sonoros. Para ser más claro, Pierre Schaffer intenta realizar en esta investigación, una clasificación y una descripción del mundo sonoro, en dirección a fines de análisis y composición musical.
Es frecuente, que se compare al TOM con el trabajo de un naturalista. Ya en el prefacio a la edición española se lee: “El tratado aborda, según el ejemplo de los grandes naturalistas, la clasificación de los objetos sonoros en su morfología y su tipología....” (Schaeffer; 1988: prefacio)
Este es sólo uno de los modos de “leer” el texto de Schaeffer. Sin embargo, considero que el TOM es mucho más que eso. Esta obra plantea una cantidad de cuestiones de las que todavía, a cuarenta años de su publicación, no se han extraído todas sus consecuencias.
El Tratado de los objetos musicales es el informe de una investigación acerca del sonido que Pierre Schaeffer realizó entre las décadas del cincuenta y del sesenta y que dio a conocer en 1966
En la primera parte de la obra, su autor, narra las instancias de descubrimiento. En la segunda parte expone de modo más o menos sistemático el producto de su investigación, es decir, la tipología, la morfología y la caracterología de los objetos sonoros. Para ser más claro, Pierre Schaffer intenta realizar en esta investigación, una clasificación y una descripción del mundo sonoro, en dirección a fines de análisis y composición musical.
Es frecuente, que se compare al TOM con el trabajo de un naturalista. Ya en el prefacio a la edición española se lee: “El tratado aborda, según el ejemplo de los grandes naturalistas, la clasificación de los objetos sonoros en su morfología y su tipología....” (Schaeffer; 1988: prefacio)
Este es sólo uno de los modos de “leer” el texto de Schaeffer. Sin embargo, considero que el TOM es mucho más que eso. Esta obra plantea una cantidad de cuestiones de las que todavía, a cuarenta años de su publicación, no se han extraído todas sus consecuencias.
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